SAL Y CORAZÓN: ¿ALIADA O ENEMIGA?![]() Durante décadas el mensaje fue simple: menos sal, más salud. Sin embargo, cada vez más voces contradicen esta idea. ¿Cuál es la verdad? La hipertensión: el asesino silenciosoMás de mil millones de personas padecen hipertensión en el mundo. La mayoría ni siquiera lo sabe. Esta condición aumenta el riesgo de infartos, ictus e insuficiencia renal, y la sal juega un papel clave. Sodio y presión arterialEl sodio, presente en la sal común, afecta directamente tu tensión arterial:
La relación es clara y dosis-dependiente: cuanta más sal, más riesgo. ¿Cuánta sal es demasiada?La OMS recomienda menos de 5g al día, pero el consumo medio global supera los 10g diarios. Y la mayoría proviene de fuentes “invisibles” como pan, embutidos, platos preparados y ultraprocesados. ¿Es peligrosa también la falta de sal?Algunos estudios sugieren una curva en forma de “U”: ni demasiada, ni demasiado poca. El rango de menor riesgo se encuentra entre los 3 y 5g de sodio al día. El otro protagonista: el potasioMientras el sodio eleva tu presión arterial, el potasio la baja. Una dieta rica en potasio:
Está presente en frutas, verduras, legumbres, frutos secos y sales potásicas. ¿Qué puedes hacer tú?
ConclusiónTu presión arterial no depende solo de la sal. También influyen tus hábitos alimentarios, tu nivel de actividad física y tu bienestar emocional. Pequeños hábitos. Grandes efectos. Cuidarte no es complicado, pero sí urgente. Tu corazón lo agradecerá. |
Bibliografía — Hipertensión y consumo de sal
- 2024 ESC Guidelines for the management of elevated blood pressure and hypertension.
- Salt substitution and salt-supply restriction for lowering blood pressure in elderly care facilities: a cluster-randomized trial.
- The Proportion of Dietary Salt Replaced With Potassium-Enriched Salt in the SSaSS: Implications for Scale-Up.
- Potassium-Enriched Salt Substitutes: A Review of Recommendations in Clinical Management Guidelines.